lunes, 26 de noviembre de 2012

Cómo ser mejores padres y madres


A lo largo de los años, cada vez que una pareja deciden formar una familia, surge la pregunta clave, independientemente de la edad que tengas o de si eres hombre o mujer: ¿sabré ser un buen padre o madre? Lógico si tenemos en cuenta que los niños vienen sin libro de instrucciones (cuantos disgustos nos habríamos evitado si en lugar del pan hubiera un folleto con el funcionamiento y el mantenimiento).   Con el tiempo y a base de gritos y malos ratos nos damos cuenta que criarlos no es tan difícil, lo complicado y difícil es hacerlo bien. Porque en realidad cuál es el objetivo que tienen los padres cuando tienen un hijo: verlo crecer sano, educado, querido, inteligente, el más guapo del barrio, y sobre todo y lo más importante, que sea un niño feliz!!
Llegados a este punto, la pregunta que deberíais haceros es: ¿qué es para nosotros ser feliz?.....
Para unos padres será, que no le falte la comida, que tenga todo el cariño del mundo, que se lleve bien con sus hermanos, que tenga todas las cosas materiales con las que sueña, etc... todo eso está muy bien si realmente creéis que eso le hará feliz, pero os habéis detenido a pensar si todas esas cosas sólo os hacen felices a vosotros. 
Y si el bebe, lo único que quiere y necesita son demostraciones de amor, de forma que cuando toma el pecho, la madre no esté gritando o haciendo mil cosas al mismo tiempo y le diga que le quiere, o que el padre cuando llegue, sea la hora que sea, lo coja en brazos y le hable (aunque esté dormido).O cuando es un poco más mayor se le dedique tiempo para jugar con él, leer, escuchar música o simplemente hablar y preguntarle que piensa de esto y lo otro y que le gusta o no le gusta.

Si la gran mayoría de padres (da igual el sexo) tuvieran una buena comunicación con sus hijos desde pequeñitos, cuando llegarían a la adolescencia no nos encontraríamos con esos padres desesperados con hijos que no les hacen caso y son completamente intratables y tampoco habría hijos que se marchan de casa porque nadie les comprende.

Dentro de la comunicación entra también el cómo decir las cosas: cuando el niño rompe un jarrón, el hecho de gritarle y ponernos como locos, no hará que el objeto en cuestión vuelva a su estado original y en cuanto a él, lo único que conseguiremos es asustarlo y que no nos escuche. No será mejor, sentarnos a su lado y preguntarle que a pasado y cual a sido el motivo por el que se ha roto, al tiempo que le explicamos que ese, era un objeto al cual teníamos mucho cariño y que estamos muy tristes por su pérdida. ¿Cómo creéis que el niño responderá mejor, con la primera o con la segunda opción? Y si lo ha hecho sin querer cómo creéis que será su comportamiento cuando esté con la pelota en el comedor, sabiendo que su madre se pondrá muy triste si rompe otra figura.......

Conclusión: para ser un buen padre o madre, no es necesario realizar un master de vida, sino simplemente pensar que los hijos son también personas (muy pequeñitas al principio) pero que tienen sentimientos, necesitan cariño, confiar en sus padres para cubrir sus necesidades y que alguien les escuche y entienda al igual que un adulto.

Personalmente yo siempre aplico una máxima con la que vivo y me siento muy feliz: no hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran a ti. A ti te hubiera gustado que te dejaran todo el día en el parque delante de la tele sin decirte nada o que te gritaran por todo lo que haces.....pues entonces.....tu por qué lo haces........?

 



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