En estas fechas lo normal es
desear a los amigos, conocidos y familiares una Feliz Navidad o Felices Fiestas,
porque realmente, la gran mayoría es lo que deseamos para nuestras personas
queridas o conocidas, pero no a todo el mundo nuestros deseos se les cumplen.
- · Unos porque estas fechas les ponen tristes.
- · Otros porque tanto trajín de compras, comidas y charlas les ponen de los nervios.
- · Otros porque a priori, el hecho de juntarse en una misma mesa con los suegros, cuñados y niños les pone el bello de punta.
- · Y otros porque unas Navidades no salieron como esperaban y piensan (erróneamente) que todas serán igual.
Sea por el motivo que sea, si uno piensa que algo saldrá mal……. seguro
que saldrá mal.
Según la Ley de la
Atracción, lo que piensas es lo que atraes, y puedo confirmarte que esto es así
y si no me crees, haz la prueba.
Piensa en un día que te
levantaste y pensaste, que bonito día, hoy me siento bien, seguro de mí mismo,
con ganas de comerme el mundo, seguro que voy a tener un día fantástico. Y al
final del día, lo valoraste como tal, fantástico. Si es verdad que surgió algún
contratiempo, pinchaste una rueda y se te quemó la tortilla, pero esos dos
pequeños obstáculos no pudieron hacer que ese día se estropeara.
Ahora valora ese día en el que te
levantaste y pensaste: Vaya porquería de día que me espera, está lloviendo y
tengo que dejar el coche en el mecánico y coger el bus, después recoger a los
niños en el cole e ir a ver a mi madre que quería contarme no sé qué cosa…
Aunque te hayan devuelto el
reintegro de tu número de la ONCE, y te llamaran del taller para decirte que la
reparación no era tan grave y sólo valdría la mitad de lo presupuestado, al
final del día, la conclusión seguiría siendo la misma: el día había sido una
porquería y aunque el sol salió a media mañana, tu percepción fue la misma
hasta que te acostaste.
Y eso por qué, te preguntarás. Pues muy sencillo, tú lo has pensado, tú
lo has conseguido.
Cuando las personas pensamos en
positivo, nos sentimos más motivadas, positivas, empáticas y dispuestas a que
todo nos parezca bien. Pero cuando somos negativas, cualquier contratiempo nos
ayuda a confirmar nuestro pronóstico, el día será para olvidar.
Después de haber leído esta
pequeña explicación, espero que te hayas dado cuenta de cómo funciona esto y
que por tu experiencia te des cuenta de que es verdad.
Si quieres pasar una Feliz Navidad con tu familia, sólo tienes que
desearlo, visualizarlo y realizarlo.
1-DESEARLO: Tienes que pensar
sobre cómo quieres que transcurra esa comida. De qué hablareis, qué comeréis, y
si surge algún obstáculo (gritos de los niños, malas palabras del cuñado, se
quema algún plato de la comida) debes tener un Plan-B para que el obstáculo no
os amargue la reunión.
2-VISUALIZAR: Todo lo
reflexionado en el primer punto, debes visualizarlo, como si estuviera sucediendo
ahora, sentados en la mesa, las conversaciones, la comida, la decoración, que
parezca que está sucediendo en estos momentos.
3-REALIZARLO: Cuando llegue el
gran día sólo debes ponerlo en práctica, tal y como lo habías visualizado, y
como ya tienes mucha práctica de años anteriores, de lo único que debes
preocuparte es de tener ese Plan-B preparado para cualquier contratiempo que
surja, y así todo saldrá perfecto.
Si lo haces así, nada puede
fallar. Primero porque tú tienes claro que todo saldrá bien y nada ni nadie
puede amargarte el día. Segundo porque es verdad que tú no tienes el control
total de la reunión, pero si puedes hacer todo lo que está en tu mano para que
sea como tú tienes previsto, y al igual que en el ejemplo de que suceda lo que
suceda ese día será fantástico, en estas fiestas tan especiales, no depende de
los demás que tú seas feliz y positiva/o y te lo pases bien, sólo depende de ti,
por tanto no dejes que nada ni nadie lo estropee.
¡FELIZ NAVIDAD Y
FELICES FIESTAS!
¡Gracias por tus comentarios!